EL CUENTO DEL TIO CULEBRERO.

El culebrero Uribe
Foto cortesía uribestiario.wordpress.com

Por: Omar Orlando Tovar Troches –ottroz69@gmail.com –

En una tierra no muy lejana, distinta a esta que fue consagrada a las Benditas almas del purgatorio, vivía el Tío Culebrero.
Un buen día, el Tío Culebrero quedó medio desocupado sin nadita que hacer, por culpa de unos muérganos sin oficio, que él mismo había convidado y recibido en su finca, para que se la ayudaran administrar y que ahora se le habían “voltiao” y hasta mandaban más que él. Tío culebrero, igual de inquieto que otros Tíos que viven en la orilla derecha, no se aguantó más que estos muérganos siguieran haciendo de las suyas en su finquita y cansado de estar mandando razones con Tío trinador, se puso a pensar en lo que tenía que hacer para que los que eran sus peones, o al menos esa mayoría que se le habían “voltiao” le pararan bolas de nuevo, para así volver a mandar en su solarcito.
Mientras Tío Culebrero pensaba y pensaba y mandaba y mandaba razones con Tío trinador y una que otra muchacha y uno que otro muchacho hijos de los que fueron sus capataces, Tío Culebrero maldecía la hora en que su yegüita se volvió marxista-leninista-maoísta-trotskista y lo aventó así, sin más, al piso y le chorreara el cafecito en sus recién estrenadas botas “machita”. Que ahí fue la hecatombe, porque esos facinerosos venidos de no sé dónde, se tomaron la finca y empezaron a perseguir la gente de bien, que sin querer queriendo se había enredado una que otra morrocota en tal o cual carriel, pero que eso no era nada, que dizque habían mandado a “asustar” a uno que otro narco terrorista disfrazado de indio, negro, estudiante, profesor o lesbiana, ¿qué tal? quien los mandaba a estar tan envalentonados con él, el Tío Culebrero, patrón de patrones.
Y así estaba hasta que se le ocurrió su más grande idea: Volver a coger la talega, su sombrero, su poncho, la caja de margarina la fina, sus frascos viejos, el carriel, el megáfono y a llamar a su amado y despistado pueblo.
“Hagan la rueda señores y señoras viejas y viejitos, señoritas viudas y casadas solteras y arrejuntadas que le dieron gusto al gustico, que llegue yo el Tío Culebrero. He venido a esta comarca para ofrecer entregar o regalar este nuevo producto que se llama NO PERO SI. Lo digo de diferentes maneras para que me entienda el intelectual el hombre de mediana cultura el ignorante o el curioso como usted amigo navegante extraditado o en huida, que por ganas de conseguir plata o mirar cosas de brujerías, como pepa de guama vino a caer aquí.
Vengo “voliando quimba” sin dar descanso a mis patas, para hablar con el señor Yolopongo el cacique sabiondo que me dio el secreto para curar y Procurar los males porque hace rato los guales están “rondiando” su cama. Que cartillas pornográficas pa´ los niños y niñas, que matrimonio entre “mariposos y machorras” y por encima Satanás volando con el tridente en la mano para ensartarlo tan pronto cuelgue los guayos y se vaya para el otro lado.
Pero no se preocupe mi Don, señora o señorita viejos y viejitas que les tengo la solución: El próximo 2 VOTE NO PARA EL SI, o lo que es lo mismo siga haciendo la guerra pa´ lograr la paz. Si se le infla la barriga y le duele hasta la cola, no se preocupe; con uno que otro “rialiti” de mis amigos de la tele se le quita o sino pregúntele a las encuestas. Para las gorditas, para las flacas, para la niña que ya le pica, que ya le pica caña al burro, para cazar maridos le tengo un saldo surtido de tangas tanguitas o calzonarias “floriadas” y cómo no, las “atrapapeos” marca Procurador.
Pa’ usted borrar esas manchas que le jodieron la cara o la hoja de vida, hay una receta rara que yo solo la he vendido, coja un caracol molido y apachúrreme ligero cuatro limones enteros y se me unta esta pomada y si no sirve pa’ nada, tiene que cambiarse el cuero o salir corriendo pa´l extranjero, así le dije a mi amiga Pilarica, a mi hijito Andresito, no me hicieron caso y ya los cogieron.
¿No puede tener un hijo mi señora, no sabe qué hacer y por dónde empezar? ¿Su perro cuando come se mueve mucho, y eso la desespera? ¿Señora o señorita, siente que le pica y no aguanta el ardor y se tiene que estarse sobando? ¿Lo quieren meter preso por tener amistades peligrosas y usted de eso ni una cosa? Bendito sea mi Dios que le hizo la cresta al gallo, la cola al caballo y el pico al diostedé, a la mujer le dio por donde y al hombre le dio con qué. El 2 Vote No para que sea un SI camuflajeado
Si su esposo mi señora es muy perro, traicionero como Juanma ese vergajo, cójase un pelo de abajo, de los del jarrete del pie, arranque callos vusté y tres pelos del sobaco, embútaselo al verraco en un pocillo de cacao y ahí tiene usté al desgraciao, pa’onde usted lo volté. El 2 Vote No para que sea un SI camuflajeado.” *
Y así siguió Tío Culebrero, pensando y pensando, trinando y trinando, mandando razones y razones con esa muchachada amiga de la televisora y de la radio, pero como que ya no querían hacerle caso.
Agarró su camándula, receloso se encaramó en la Yegüita marxista-leninista-castro-chavista y se fue a buscar lo que, él se imaginaba, le hacía falta a su magnífico plan: la inolvidable Culebra Margarita. Ya no alcanzaba con María del R, o Paloma S, Ana M, Susana, Paola o Nohora, ellas para lo que servían era para repetir como las loritas que él nunca tuvo de niño, a lo sumo para asentir con la cabeza y repetir a coro; que todo lo que decía el Tío Culebrero era cierto, pero no más. Él necesitaba a Margarita, a la única hembra a la que de vez el cuándo, él, el famosos Tío Culebrero, le tenía que pedir: estese quieta…Margarita.

• Texto inspirado en “EL CULEBRERO O YERBATERO PAISA.” tomado de: http://www.chispaisas.info/vender.htm

Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión del magazincnc.com